Que llegue a tus manos un libro muy deteriorado ( es este caso una Biblia ) y que puedas devolverlo en las mejores condiciones para que puedan disfrutar de él otros muchos años, es un orgullo.

Es increíble ver como la persona que te ha pedido que la recuperes, se emociona cuando la recibe, ese es mi trabajo, pura emoción y estoy realmente contenta con el resultado.

No soy restauradora, ni conservadora pero si soy una encuadernadora apasionada de los libros y sobre todo de su cuidado  dentro de mis posibilidades e  inquietudes que no dejo de fomentar con mucho aprendizaje.